Una "Egolatra sin orgullos"

Hoy amanecí con ganas de mirar el cielo y perderme en su infinito color…  hoy prefiero el gris carente de vivacidad que los colores fuertes que transitan por las calles de esta ciudad caótica y llena de paradojas que me hacen doler la cabeza… hoy prefiero perderme en el letargo de la tontería de mi mirada huidiza y no en las miradas vacias de quienes caminan por ahí… hoy deseo solo escuchar la voz de mi interior pero no a  las embrutecedoras voces de los que hablan por hablar…  hoy amanecí con ganas de bañarme en mis lagrimas y hacer caso omiso a las de los demás que me parecen redundantes gotas nimias que lloran por llorar… hoy solo quiero tocar el matiz de mi piel y procurar exageradamente no rozar con esos cuerpos desconocidos que pasan por pasar… hoy necesito vivir solo con mi aroma y aborreceré el de los demás, sin importarme si son deliciosos perfumes franceses o simples humores fétidos… hoy no quiero susurros ajenos, ni caricias, ni mentiras, ni promesas, ni ilusiones, ni llamadas, ni excusas, ni problemas, ni felicidades, ni momentos que no sean exclusivamente, egoístamente y especialmente míos…  Un día le escuche decir una frase a un actor en un monólogo que el mismo escribió: “Soy un ególatra sin orgullos”, no la entendí y ahora más de un año después la comprendo, me entiendo muy bien con ella. Hoy amanecí siendo una ególatra sin orgullos, un poco mas misántropa que ayer y como dicen los tontos enamorados menos que mañana…